Por fuera la historia cambia, ya que no comparte prácticamente nada con su primo de Dodge. De hecho, sólo la parrilla y los faros redondos es lo único que pueden parecerse, digamos a una Liberty a escala. Lo demás es original y apuesta por una imágen robusta y agresiva, invitando a rodar fuera del pavimento; tal es el caso de las abultadas salpicaderas, que además contribuyen a darle un aspecto de mayores dimensiones de las que tienen en realidad.
Otros distintivos del costado son las manijas de las puertas traseras ocultas en los postes "C" y la forma triangular de los últimos cristales. Finalmente la parte posterior nos recuerda a varios modelos del grupo, como la Grand Cherokee en combinación con las calaveras de la última Ram Charger; cuestión de enfoque.