Una crisis de hidrocarburos nos amenaza para dentro de 25 años, y en la actualidad, las emisiones contaminantes afectan de manera severa el medio ambiente. Por fortuna, los autos híbridos, eléctricos, de hidrógeno y de celdas, entre otros, ofrecen una solución.
En los coches que usan combustibles alternos hay tres niveles: los que ya son una realidad (los que usan gas natural, alcohol, biodiesel), los que apenas comenzaron su camino (eléctricos, híbridos, celdas de combustibles) y los que se gestan en los laboratorios (energía solar, hidrógeno, aire comprimido y la tan añorada fusión nuclear). En el segundo nivel están situados los esfuerzos de las empresas automotrices. Los coches híbridos, de celdas de combustibles y eléctricos ya son una realidad palpable y aunque todavía existen algunos pequeños inconvenientes que radican más en una falta de insfraestructura para recarga que en su desempeño, tienen ventajas importantes en economía y cuidado del medio ambiente.